¡EL MEJOR DÍA DE MI VIDA!
Era un magnífico día de invierno, un poco nublado, me asomé a la ventana y... ¡no podía creer lo que estaba viendo! ¡estaba nevando!
Copos de nieve caían suavemente al jardín, las flores de colores vistosos, los árboles verdes, se cubrían de blanco y la ciudad se llenaba de nieve.
Observé la nieve desde mi habitación, corrí a vestirme, baje las escaleras rápido, desayuné sin para y me dirigí al salón por mi abrigo, bufanda, guantes, gorro y salí corriendo de mi casa.
Fuí a casa de Laura, para poder salir con ella a jugar con la nieve, toqué el timbre y Laura me abrió. La esperé mientras cogía su gorro, guantes, bufanda y abrigo. Salimos y comenzamos una pelea con las bolas de nieve, terminamos y decidimos hacer un muñeco.
Yo hice una bola gigante y Laura hizo otra más pequeña.
Después cogimos dos palos y los colocamos simulando los brazos, fuí a casa y cogí botones grandes y negros para la boca y los ojos, una zanahoria para la nariz y bufanda y sombrero para abrigarlo.
Le colocamos todo, al terminar mi madre echó una bonita foto con el muñeco de nieve.
¡Había sido el mejor día de mi vida!
